Se presentó el
libro “El pueblo triqui de San Juan Copala y el ritual de la boda.
Cambios, permanencias y desafíos”, el pasado viernes 15 de febrero
de 2019, en el Centro Cultural San Pablo, cuya portada es la
siguiente:
Contraportada y portada, extendidas.
Ya lo tenemos a la
venta en nuestra librería virtual www.carteleseditores.com
y en nuestra librería de Colón 605, Barrio de los 7 Príncipes,
ciudad de Oaxaca, a un costo de $250.00, con envío gratis a
cualquier parte de la república mexicana.
Durante muchos años
ha corrido de boca en boca una versión que dice que los padres
triquis “venden” a sus hijas casaderas. Quienes nos dedicamos al
periodismo y a la investigación sabemos que es un “chisme”,
fruto del total desconocimiento de las tradiciones de ese grupo
etnolingüístico, pero se ha seguido esparciendo a través de
reportajes, con un tono amarillista y discriminatorio.
Esta es la primera
vez que la respuesta sale desde dentro de la misma comunidad
agraviada y lo hace a través de la explicación contextual de lo que
es la boda tradicional triqui, donde la novia recibe del novio una
dote en dinero, el cual su familia guardará y se lo entregará
cuando ella, como mujer, requiera de medios económicos para
enfrentar emergencias familiares: enfermedad, construir una casa,
comprar un lote, algodón para hacer sus textiles y también para
sobrevivir en caso de abandono o desaparición del marido.
Por ser una etnia
con costumbres muy antiguas, así es como la mujer tiene un
guardadito para enfrentar lo que le venga en su vida de casada. No es
nada frecuente el divorcio entre parejas triquis, pero las
influencias que reciben a causa de que muchos varones se han ido al
norte o a Estados Unidos de braceros, ha empezado a cambiar el
panorama tradicional, aunque no necesariamente para mal.
Como se sabe, en
Copala se vive desde hace décadas un clima hostil causado por pugnas
políticas internas. Ello hace que muchos de sus varones abandonen su
comunidad a temprana edad, para sobrevivir, mientras las mujeres se
quedan o migran a las ciudades, donde se emplean en lo que pueden o
se vuelven artesanas que viven de mercadear sus producciones.
Muchas veces el
pueblo triqui ha sido mencionado en la nota roja, pero este libro nos
lo presenta como un pueblo de tradiciones y rituales que se siguen
cumpliendo y forman parte de su identidad cultural. Es una manera
eficaz de conocerlos para no caer en el equívoco chismoso de crer
que “venden” a sus jóvenes. De ninguna manera ocurre eso, pero
faltaba una publicación que nos diera el panorama completo de la
costumbre de la “dote”, que se acostumbra también entre los
pueblos zapotecos de Valles Centrales y el Istmo, así como en otras
latitudes del mundo.
La investigación la
realizó Alessandra Galimberti recogiendo el testimonio, razones y
enseñanzas de doña Emelia Ortiz García y de don Juan Domingo Pérez
Castillo, quienes conocen a fondo a su propio pueblo.
Reseñó: Claudio Sánchez
Reseñó: Claudio Sánchez
No hay comentarios:
Publicar un comentario