martes, 27 de marzo de 2018

La iguana veracruzana y el garrobo oaxaqueño

El cuento que hoy ocupa esta entrada tiene la siguiente portada:


El tema del deterioro de la naturaleza es preocupación no solo de científicos y periodistas especializados, sino de autores como don Romaldo Garrido Altamirano, de Jalapa del Marqués, en el Istmo de Tehuantepec.

Acaba de sacar a la publicidad su historia narrada por una iguana verde, que es una bella hembra bautizada "Galanlí", jarocha y pispireta, y un garrobo oaxaqueño (iguana macho, de color negro) llamado "Nayase", muy galán y valiente.


Ambas iguanas se encuentran por casualidad en un punto del Istmo, pero han tenido contacto con humanos y desconfían de éstos. Al huir de su depredación, pues en el Istmo la iguana se guisa y consume en distintos platillos, desde tamales hasta moles, llegan a un paraíso natural poblado de una variedad de fauna y flora tan bonitos que les hace creer que están en el paraíso... Los demás pobladores del lugar y las bellas lunas de la selva hace que se enamoren las iguanas y se casen y tengan iguanitas, pero un día escuchan el estruendo de máquinas... ¡Es la civilización que llega con trascavos tumbando la selva, su hábitat! Y deben huir....




Todas estas aventuras están narradas con gracia, con humor y con ejemplar pedagogía y además están profusamente ilustradas, así que el cuento tiene una moraleja, pero antes, deja muchas enseñanzas respecto al valor de la flora y fauna nativas para que el planeta Tierra no acabe como el planeta Marte: sin una gota de agua, sin un solo árbol, sin fauna, sin luna, sin vida.

El autor escribió el siguiente texto en la contraportada:


LA PRESERVACIÓN DE NUESTRO ENTORNO ECOLÓGICO

En este cuento se quejan los animales del ser humano, porque les destruye su hábitat y los caza indiscriminadamente poniendo a las especies en peligro de extinción.

El autor y los que colaboramos en esta edición, esperamos que sea de su completo agrado y despierte en todos los que lean este libro la conciencia ecológica.


Don Romaldo Garrido Altamirano es autor de varios textos narrativos y de poesía. Aquí fue retratado con Nayaze y Galanlí por el estupendo ilustrador de su cuento, don Félix Sibaja Martínez.
Para comprar un ejemplar de este cuento por favor póngase en contacto con el autor al siguiente correo electrónico: aldogarrido.55@hotmail.com o al cel: 921 134 06 33.


A través de ellos puede conseguir otro libro del mismo autor. En éste se expresa su capacidad para la poesía. Su portada es la siguiente:




En esta escena que es poco usual, se puede ver como emerge completo el viejo convento y templo de Jalapa del Marqués, ya que por haber quedado en el vaso de la presa Benito Juárez, siempre está cubierto por el agua. Es una maravilla natural y en este caso, por causa de la gran sequía con que azotó al Istmo el año 2016, se pudo ver esta escena.
El libro tiene versos. Estos son dos ejemplos:



Los motivos del autor para escribirlo aparecen en contraportada de esta manera:

En Jalapa del Marqués, Oaxaca, fue construida una presa, las construcciones del pueblo quedaron bajo las aguas, a la fecha la única que permanece en pie, a pesar de las inclemencias del tiempo, es el templo de la Asunción de María.
Yo nací ahí en el Jalapa Viejo.
Inspirado por mi pueblo viejo, sepultado por las aguas de la presa “Presidente Benito Juárez”, compuse la canción La casa de abobe.
También escribí versos, en honor a los templos de Jalapa Nuevo, como el de San Sebastián Mártir, la Virgen del Rosario, la Virgen de Guadalupe, La Asunción de María y para el templo de la Santa Cruz, escribí Jesús Crucificado.
El relato de Dios nunca muere, lo escribí a la memoria de familiares y amigos que se nos adelantaron en el andar de la vida, de manera especial para mi cuñado José del Carmen Rodríguez Salazar, que falleció en días pasados en Coatzacoalcos, Veracruz, mejor conocido como el “Pato”.

Dedico este libro para mis hermanos oaxaqueños y hermanos veracruzanos, muy en especial para mi gente bonita de Jalapa del Marqués, Oaxaca y esa gente bonita de Nanchital, Veracruz.
También a familiares, amigos y a todas las personas que comparten el gusto por la lectura.

“Cuando un pensamiento lo escribes con sentimiento 
que sale del fondo del corazón, es amor y amor es poesía”.


Romaldo Garrido Altamirano.